Taberna

El ambiente vivaz generaba un gran gozo en su corazón, no paraba de sonreír y aplaudir mirando a los bailares, algo bebidos pero bastante capaces de moverse y crear un gran espectáculo – genial!!  Como puedes bailar así luego de beber 3 litros de cerveza artesanal! -  exclamaba la joven a uno de los bailares más cercanos el cual le hizo un guiño y continuo danzando – increíble resistencia no creía que podría aguantar … me tomo tiempo aprender a hacerlo...– pensaba sonriente, había traído su propio cerveza, llevaba ya tiempo intentándolo en su templo y finalmente surgía la ocasión para poder darlo a conocer… claro luego de hablar durante un tiempo con el encargado.

Lucil vestida de un traje negro de cuero como motociclista se encontraba muy alegre, ya había bebido una gran cantidad pero que eso no engañe a nadie, podía beber mas si lo deseaba pues el alcohol no le afectaba con facilidad.

En aquel lugar fácilmente habían 30 personas, muchos estaban sentados bebiendo con sus amistades y algunos otros degustando  lo que traían de la cocina, Lucil solo estaba interesada en la música y en el baile, le encantaba la atmósfera irlandesa y era por eso que llegaba varias horas en la taberna, se sentía responsable de hacer que todos bebieran, sobretodo quienes tocaban instrumento  y danzaran,  que los demás disfrutaran de su trabajo le causaba gran gozo y porque no admitirlo, le encantaba ver a la gente fuera de sus sentidos.

Narro - Pienso - Hablo

Hoy era una de esos días en los que Kübra lo acabaría arrastrando a uno de esos lugares odiosos y llenos de depravación donde los hombres buscan refugio en la bebida, en la bebida y a saber que más cosas. No, definitivamente no le gustaban las tabernas y aunque aún no había visitado ésta en cuestión ya había visto suficientes para saber que todas solían ser iguales. ¿Para que ibas a ir sino era para beber?

¡Oh vamos! ¡Tengo mejores cosas que hacer que ir a una taberna! - Refunfuñó mientras la chica le cogía de la mano para tirar de él.

Veras que va a ser divertido - La escuchó decir justo antes de que lo empujara bruscamente en el interior de la taberna con tal fuerza que acabó estampándose contra una mesa que estaba a pocos metros de la entrada.

Disculpen... - Murmuró a los hombres de la mesa antes de girarse para lanzarle una furibunda mirada a su compañera, la cual también se disculpaba, aunque de una forma un tanto "especial".

¿Que tenga cuidado? ¿Que no sea un inconsciente? - Refunfuñó mientras volvía a ser arrastrado lejos de la mesa. - ¿En serio?

Con los ojos en blanco se sentó en la barra junto a su vecina acuariana, a la cual aún no había tenido el gusto de conocer aunque la hubiese visto por el santuario. - [color=blue]Saludos Lucil. - Dijo antes de pedir un vaso de agua.

Kübra estaba a su lado pero prefirió ignorarla hasta que se le pasase un poco el enfado, no pensaba beber ninguno de esos brebajes infernales que tanto le gustaban a la espectro. No, esa noche no se dejaría embaucar.

No me puedo creer que me hayas arrastrado a este lugar... Siempre igual... - Refunfuñó para si mismo mientras se giraba para echar una ojeada. Al parecer la acuariana no era la única compañera de armas en aquel sitio, ni ellos eran los únicos guerreros.

Observó en una mesa a Shaka junto a otro Guerrero, que no pertenecía al santuario, así que los saludó con una leve inclinación de su cabeza antes de volver a girarse sobre la barra para tomar su vaso de agua.

La pieza musical habia terminado, ahora las cuerdas de los violines eran las protagonistas de un gran conjunto, sin duda los músicos daban todo de si, les encantaba ser oídos y porque no decirlo.. el diseño interior de la taberna le daba ese toque rustico irlandés, un lugar muy agradable si el aroma a alcohol no es de tu desagrado, aunque podría fascinar el aroma a jabalí asado a quien no le apeteciera unirse a la danza de los borrachines.

Lucil aplaudía  y movía su cabeza de lado a lado, su sonrisa era genuina, se sentía feliz de que bebieran lo que había hecho – Que pintoresco es todo esto, te transporta – murmuraba mientras sus puños se posicionaban en sus mejillas, en un gesto felino – miiauuu… un cosmos similar al mío!... espero que lo esté pasando bien- murmuro con sus ojos cerrados y un ligero rubor en sus mejillas, no era el lugar en que le hubiese gustado reunirse con sus camaradas .. Menos si emanaba un ligero aroma a destilado… y por no decir menos… su actitud tan alejada a la de una amazona del santuario… ok… agregándole que su signo zodiacal… la onceava casa de acuario… - Se supone que debo ser seria…  aunque sería un estereotipo por lo que le he escuchado- pensó  tras una sonrisa y aun con aquel rubor que le daba un toque inocente.

-Señorita, de parte del hombre de la mesa, su nombre es Bore – Dijo un mesero llamando la atención de la dama, la cual voltea y acepta el gesto,  este le señalo de donde provenía tal muestra de generosidad y la joven correspondió con una sonrisa.
Al mirar en aquella mesa nota a su camarada, Shaka de virgo. Del cual conocía pero lamentaba que no fuese lo suficiente para actuar con familiaridad – me recuerda a mi hermano mayor… su largo cabello…desearía acariciarlo... pero... modales...- pensó dedicándole unos segundos mientras le sonreía y movía sutilmente su mano a modo de saludo, a su lado se encontraba aquel  generoso hombre – fue muy amable de su parte… pero mis sentidos felinos me indican que algo trama… a menos que conozca a Shaka no me explico porque llamar la atención de ambos- pensó manteniendo su sonrisa, se dirigió a ambos y tomo asiento.

-Buenas noches … Shaka… Bore – hizo una pausa en cada nombre dedicándole una sonrisa a ambos.

Mientras esto ocurría noto la presencia de dos personas, una pareja, la minina les miro de reojo, la mujer se veía muy amable y su acompañante al parecer no deseaba estar en tal lugar, la acuariana suspiro y posiciono la copa en la mesa.

-Muchas gracias Bore – dijo dedicandole una calida sonrisa

Escucho su nombre a modo de saludo, era aquel hombre serio, sus blancas orejas se movieron, volteo a mirarle y le dedico una sonrisa mientras levantaba su mano – Que modales los míos… es Shei… mi manis querido… imagino que entenderá que debo actuar como una adulta…- pensó mientras tocia brevemente, mostrándose por un momento seria.

-¿Qué les parece el lugar?- pregunto dando inicio a la conversación.

Bore, sorprendido de que ambos se conociesen, dejó que hablasen sin interrumpir, esperando su momento para hablar educadamente.

-Pues si les soy sincero chicos, no soy de frecuentar lugares como...- miró un poco de reojo el local, con cierto desagrado. -...este. Pero un pajaríto me contó que aquí se reunía gente interesante, y po lo visto no mentía.-

No solía ver cinis a menudo, pero tampoco le hacía ascos como el resto del mundo, al contrario. Y menos si aquella mujer emanaba un poder similar al suyo, pero distinto a su modo. Lo que si le llamó la atención fue un poder más parecido al suyo, viniendo de una joven al lado de otro hombre, también poderoso. Las cosas se ponían interesantes de verdad.

-¿Saben qué? ¡Invito la siguiente, hoy estoy de celebración!- Dijo golpeando la mesa con la copa, para luego llamar al camarero para pedir otra ronda.

-Así que... ¿De que se conocen ustedes? ¿Fueron a la misma universidad o así?- Bore no esperaba una respuesta sincera, pero la curiosidad podía con él.

Ante el acto de caballerosidad de Shaka la amazona permaneció inmóvil un instante, masticando la situación para poder tragarla y dedicarle una gran sonrisa, tal acto de gentileza no era algo que acostumbraba a recibir, que su camarada lo hiciese al instante le causo un gran gusto que no pudo escapar de un movimiento de su blanca cola, mientras sus siniestra se posaba sobre la base de su cuello – Aaaawwww… que dulzuuura – pensó dedicándole una sonrisa.
La respuesta que le dio le hizo soltar una risilla – Ocasionalmente, me gusta este toque Irlandés y  están sirviendo un invento mido… muchos están “ alegres” gracias a esto… quería darme el gusto de verles disfrutar a estas horas…–  sonrió cerrando sus ojos para beber completamente la copa – veremos… veremos en que se transforma… mi bebida tiene un alto % de alcohol… oculto en su dulzura que causa beber más y más… será divertido ciertamente- pensó sonriendo mientras miraba a un costado mientras soltaba una risita más pausada que la anterior.

El entusiasmo de Bore le causó gran gusto,  levanto su diestra y soltó un maullido, se sentía a gusto, sabían que era una Cinis y sin embargo le trataban como una igual, de modo que no se sentía avergonzada.

Podía sentir que la energía que emanaba Bore era distinta, sus sospechas se disiparon y deseo ver la situación como lo era… un lugar de diversión.. con personas muy peculiares.. pero eso no ameritaba estar alerta, por lo menos aun no – pero el misterio?... oh dulce y sutil misterio- pensó cerrando sus ojos un instante.

-Pues Shaka es mi compañero de piso-

Dijo sonriendo mirando al rubio con tal de que le entendiera – No es necesario decir que somos camaradas del santuario…  creo que no es el mejor lugar para  exclamar que eres un defensor de la justicia – le hizo un guiño esperando que le siguiese el juego.

El camarero se percató de la solicitud, retiro las copas vacías de la mesa, la amazona le miro de reojo y levanto su pulgar – ¿Puedes traer de mi regalo por favor? Aun no lo prueban – dijo dulcemente y aquel apresuro el paso

-Espero que no les moleste, deseo que lo prueben,  al final de la noche sabré si debo seguir investigando o ya puedo ponerle nombre, de modo que su opinión es muy valiosa para mí-



-Podría hacer algo ahora?... no… no.. es muy pronto… esperemos… tal vez debería darles a Shei y a su acompañante… algo que les haga animarse y que deje esa cara larga… jijiji aguarda aguarda… aún hay tiempo… - pensaba  manteniendo la dulzura en su rostro.