Alasdair vs Angelius ( Elemental)

La guerra habia iniciado, santos contra espectros una vez retornaban al campo de batallas, algunos se reconocían tras la anterior guerra santa pues tan solo habían transcurrido 7 años, mientras que otros totalmente inexpertos a aquel acontecimiento se esforzaban como podían para lograr mantenerse con vivos para seguir luchando en nombre de sus lideres. Los gritos de dolor como de victoria se mezclaban con la lluvia y los truenos…

El numeroso ejercito del inframundo superaba al numero de integrantes del santuario pero pese a aquella ventaja pronto la balanza podía caer en contra es por ello que portando su armadura divina y una espada Lucifer contribuía a la derrota del santuario, uno a uno partia en dos a quienes se oponían a sus ambiciones abriendo paso a los espectros con aquella afilada y gran espada, las almas salian desprendidas de sus cuerpos dirigiéndose a la jema que en la espada se encontraba, la sangre mortal cubria parte del rostro de Angelius quien con una sonrisa y una mirada fría continuaba su labor ¿Cuántos de los presentes poseían familia? ¿Cuántos de ellos apenas habían ingresado a la etapa adulta? ¿ cuantos de ellos se imagino triunfador? Ahora todos eran reducido a la tierra, futuro abono y una alma eterna que seria condenada al infierno. La mayoría de quienes caian con tanta facilidad eran los que portaban armadura de bronce, estos eran sorprendidos y erradicados por Lucifer, quien no poseía pudor en atacar al mas débil puesto que aquel numero superaba a los mas fuertes, pronto un dorado estaba en la mira y sin demora el Angel del averno clavo su espada atravesando la armadura de oro como su escapula, logrando un severo golpe que lo llevaría a la muerte, Lucifer alzo su espada que era lavada la sangre por la lluvia y fue en el reflejo de aquella fina hoja de metal donde identifico a quien seria su siguiente victima.

Los truenos eran cada vez mas fuertes, por lapsos aquel mundo era cubierto de blanco tras la estridencia de aquel efecto natural, totalmente empapado por la lluvia Lucifer avanzo al encuentro de aquel caballero de plata, mas exactamente el portador de la armadura de triangulo. Apunto con su espada señalándole con una fría depositando la espada en uno de los tantos cadáveres del santuario. No habia necesidad de las palabras… él seria el siguiente.

Caos.

Total y Soberano Caos.

Caos era lo que regia aquella tarde que se habia vestido de luto el momento que los cielos se oscurecieron cual si el sol y las estrellas no existieran y los relampagos que caian del cielo, retumbando cual voz divina, eran la unica luz que alumbraba la tierra de los mortales. El dia habia comenzado cual cualquier otro, nada fuera de lo normal, total tranquilidad, total paz. Los aldeanos se levantaban para hacer sus tareas cotidianas, los niños salian a las calles a correr para no llegar tarde a sus obligaciones educativas. Los ancianos hacian su camino hacia las terrazas de sus moradas, donde se sentaban por horas y horas, solamente viendo pasar a la gente del pueblo frente a sus calles, impartiendo sabiduria a aquellos que querian oirla. Y una que otra queja. De acuerdo en su mayoria quejas, mas todos entendian que era la edad hablando, el haber sido criados en eras anteriores. Todos esos ancianos habian logrado sobrevivir la anterior guerra santa. Muchos habian perdido seres queridos. Varios de los aldeanos vivian en paz tras aquel infierno. Infierno que jamas por mas que se me contara, podria imaginar seria asi.

Las huestes enemigas comenzaron a rodearnos, atacando primero el dulce pueblo de Rodorio, aquellos ciudadanos que habian jurado lealtad a Athena y a su vez habian jurado mantener el secreto de la existencia de los caballeros del resto del mundo. Sin ellos el santuario no podria sobrevivir, ellos sustentaban el alimento, los ropajes, el agua potable y demas necesidades basicas. Ademas nos sustentaban entretenimiento, muy necesario muchas veces para no volvernos locos en nuestro tan seguido aislamiento en el santuario. Ver tal pueblo en peligro, en llamas, no era algo que me agradace. Dudo que a nadie del santuario le agradaba. Varios no esperaron ordenes del Patriarca, lanzando de inmediato a intentar apagar los fuegos creados por los espectros de Hades, quienes el patriarca decia servian un nuevo dueño. El diablo mismo. Vaya curiosidad.

No tardo mucho para que el bulto de ambas fuerzas se encontrara, comenzando asi con esta lucha sin cuartel, donde uno lograba victoria solo para unos cuantos segundos sucumbir ante el potente cosmos de otro. No habia espacio para celebraciones, no habia espacio para victorias, ni espacio para llorar a compañeros caidos, ni para lamentar el desperdicio de vida humana en una guerra de dioses. No habia espacio para venganzas, todas estas eran privilegios de los vivos. En las guerras no hay ganadores, solo sobrevivientes, y mientras este el combate no hay vivos, puedes declarar tu vida una vez que todos en el campo enemigo esten muertos. Entonces puedes estar satisfecho de haber vivido.

Mi cosmos y mis habilidades eran muy practicas en estos momentos. Habia logrado deshacerme de tres guerreros, dos soldados rasos, a los que me habian explicado se les llamaba esqueletos, y uno superior llamados estrellas terrestres. Despues de esto, vi uno de los generales caminando hacia mi. La lucha fue desgarradora, mas con trucos y astucia logre sobrevivir, enviando su cabeza a otra dimension. Habian perdido una gran fuerza con esa muerte. Mi respiracion estaba agitada y mi antes brillante armadura azulada se encontraba ahora enteramente cubierta de sangre.

Y entonces senti aquella prescencia, desgarrante y sorprendente. Voltee hacia ella, no necesitaba estudiarle para saber de quien trataba. Podia reconocerle de inmediato al mirarle. Lucifer. La estrella del alba se acercaba a mi, espada levantada apuntando hacia mi figura, marcandome como su proxima victima. En su camino mire como un joven de bronce idiotamente le ataco. Quedo hecho añicos en menos de un abrir y cerrar de ojos. Pobre ingenuo. Bueno, si queria una batalla, una batalla tendria. Tome una lanza que se encontraba clavada en el suelo, de seguro de algun enemigo. Athena decia que sus guerreros debian luchar en igual de condiciones pero al demonio "Je, Demonio" con ella. No me iba a volver carne de cañon para los dioses.

- Mas rapido, tus pasos son tan lentos como un caracol -

La sangre manchaba su espada como parte de su ropaje y su rostro, las gotas de lluvia limpiaran la magnificencia de su ser de aquella suciedad que corría por las venas de los mortales. Los truenos y la lluvia no cesaban como si poseyeran cualidades humanas reflejando la ira y la tristeza de una batalla que sin importar el triunfo de cualquier de los bandos estaba destinada a la muerte de cientos de seguidores, uno a uno los espectros y los santos caían como moscas a la tierra, sus cuerpos no tenían mayor utilidad que el fertilizar la tierra y ahora en medio del campo de batalla donde decenas de hombres y mujeres luchaban en situaciones adversas como favorecidas se encontraba un par, una deidad y un santo de plata que no temía hacerle frente a Lucifer quien con sonrisa siniestra apuntaba con su espada.

Su sonrisa se amplió ante escuchar las palabras de aquel hombre queriendo ofenderlo cuando realmente daba a conocer su propia necedad, ahora el seria su siguiente víctima y ya nadie podía desconcentrarlo de su nuevo objetivo, en un intento quizás de imitación el santo de plata cogió una lanza de algún guerrero del inframundo. El Ángel descendió su espada ya practica purificada por las lagrimas del cielo cuando esta apunto al suelo cinco grietas se formaron, cada una distanciada de la otra rodeando a ambos personajes, aquellas grietas se encontraban donde otros luchaban a muerte pero sus luchas fueron frenadas tras observar que horribles gritos junto con el fuego emergían de aquellas manifestaciones. Aquellos gritos se intensificaban como si se estuviesen acercando y en determinado punto chasqueo sus dedos de su siniestra… el fuego se intensifico la lluvia no podía frenar el poderío que esta presentaba, de aquellas flamas figuras humanas, algunas en buen estado y otras en posturas anormales, de cada circulo decenas de figuras emergían pero estas no eran táctiles, no podían ser alejadas con la fuerza bruta, era almas humanas destinadas a servir a Lucifer en la lucha. A medida que estas se alejan del fuego se puede apreciar que son simples sombras flotantes, cubiertas de un manto oscuro donde ya no es apreciable su fisionomía, el único objetivo de estas almas era el santo de Triangulo por lo que no tomaron importancia a aquellos seres rebosantes de vida que les rodeaba.

Sin importar a donde vaya el santo de plata estas le seguirían y al alejarse de su origen el aroma a cadáver se intensifico puesto que la esencia fantasmagórica que estas poseían iba ligada a la putrefacción de sus cuerpos que sería eterna pues sus representaban la muerte. Los mantos oscuros que los cuerpos de las almas no eran holgados, se podía observar el movimiento de sus mandíbulas, sonidos roncos, repetitivos y lúgubres emergían de estas al estar cerca de aquel nuevo objetivo, decenas de almas quizás centésimas de estas rodeaban al rival siendo ahora Lucifer un blanco oculto en la oscuridad de la concurrencia.


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Hp: 60


Ataque

Spiritualis poena (Nigromancia, 10 puntos)

Spoiler:

Almas...

Realmente no estaba viendome luchar, era obvio no habia estado haciendolo. De hablerlo hecho hubiera sabido que tan ineficiente era el enviar almas contra mi. Tranquilamente eleve mi cosmos, clavando en el suelo aquella lanza que habia tomado, y comence a elevarle, haciendo que se expandiese a traves del campo de batalla. Comence a recitar un mantra, algo que me habian enseñado servia muy bien para ese tipo de situaciones, y de esta manera comenzaba a regresar su identidad a muchas de estas almas en pena, recordandoles quienes eran, y liberandoles de aquel oscuro manto, dejandoles vagar libremente por este mundo, un mundo que ya no era suyo, hasta que el mundo siguiente volviese a llamarles. Inclusive con algunas hice un pacto, con tal de que me sirvieran ahora a mi, y prometia ser mucho mejor jefe que el lider de las tinieblas.

Sin embargo habia sobre estimado mi propio poder, y habia subestimado el de aquella monstruosa figura. El numero de aquellas almas era exorbitante. Aun concentrando todo mi poder no podia cubrirles, y estas seguian saliendo, seguian siendo expulsadas de los confines del infierno. Comenzaba a decaer, cuando por fin una de esas almas anonimas logro romper mi control sobre ellas y comenzo a robar parte de mi energia. Como consecuencia varias otras lograron liberarse e hicieron lo mismo, buscando el calor que habian perdido al morir, robando el mio, y comenzando a debilitarme. Tras esto, era solo cuestion de tiempo cuando una de estas quiso poseer mi cuerpo. Conflicto total en mi interior, no podia lograr controlar las almas que habia detenido y veia como comenzaban a rodearme.

No, no dejaria que terminara asi, el combate apenas comenzaba. Eleve nuevamente mi cosmos, expulsando aquellas criaturas en mi interior, mi fuerza de voluntad era mayor que las de ellas. Era un santo del santuario, un protector de la tierra de los vivos. No dejaria que estas criaturas de los infiernos me agregaran a sus filas tan facilmente. De una explosion de cosmos logre apartarlas de mis, exorcisandolas para que huyeran de mi presencia. Al terminar tome prontamente la lanza, usandole de apoyo por unos momentos. Sentia como si no hubiera dormido en semanas. Habia sido un esfuerzo muy grande el salir con vida de esa tecnica. Probablemente moriria en ese lugar. Pero de ser asi, al menos me aseguraria de que aquel monstruo frente a mi recordara quien era.

Eleve mi mano apuntandole con mi indice para dibujar un circulo en el aire, el cual manifesto de inmediato un potente sello, una fuerza contra el mal de la antiguedad, y aquel regalo por parte de mi maestro, aquella tecnica que habia pasado directamente a mi conocimiento sin entrenarme antes. El sello brillo grandemente en medio del campo de batalla, como señal de nuestra resistencia hacia las huestes oscuras que nos atacaban. Y su nombre era...

- Tritos Spuragisma! -

Al instante aquel sello se lanzo contra mi enemigo, el rey de las huestes infernales, Lucifer, con la intencion de detener sus movimientos, le serian pesadas cadenas, fuertes grilletes con los cuales pensaba detenerle aunque fuera por unos momentos, para reganar mi fuerza, tomar mi segundo aire para consecuentemente darle fin a aquel caotico combate.

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Defensa: Milo eis Nekros (Anti – Nigromancia) 7 puntos

Milo eis Nekros:

HP: 30 - 10 = 20 + 7 = 27

Ataque: Tritos Spuragisma – (Cosmos) 7 puntos

Tritos Spuragisma:

Un gran número de almas rodeaba al santo de triangulo mientras Lucifer con sonrisa malicioso podía observar a través de ellas, todas almas condenadas por sus numerosos pecados en la vida terrenal, no merecían perdón ni siquiera una trato humano, eran simples armas destinadas a un único propósito “ alimentarse de la energía de los vivos”, esto no se presentaba en características físicas que pudieran considerarse dañinas, la propia energía vital serbia de alimento para tal concurrencia que en un sentido estratégico estaban puesto que un individuo poco podría alimentarlas de modo que la ansiedad jamás desaparecería tras el simple aroma y la libertad de consumir a un ser vivo.

Su sonrisa se ampliaba tras observar lo que el santo de triangulo efectuaba ¿realmente creía que esas almas harían pacto con él? Aquellos eran condenados por fraudes y traición, ningún castigo cambiaria su esencia ni un santo de plata podría purificar sus almas, aquel poder divino estaba mas allá de lo imaginable quizás mas allá de Lucifer – Que ironía un mortal que lucha en nombre de la justicia pretende utilizar a las almas de traicioneros y fraudulentos… ¿qué diría tu diosa? Crees que ellos te serian leales, te traicionarían apenas des la espalda, jamás les concederás la dicha ni el perdón a sus pecados por lo que tus inútiles intentos no cambiaran el curso de este siclo, el control almas sin importar tus intenciones solo te lleva a utilizarlas… por ello no serás muy diferente a mi – Finalizo cerrando sus ojos sintiendo como el gran numero de almas lograba ingresar dañando al plateado, su sed de hambre era incontrolable cuando finalmente Lucifer decidió que ya era suficiente el hambre de estas disminuyo volviéndolas mas susceptibles a lo que el santo creía que era gracias al poder de su cosmos.

-No te engañes, aquellas no tienen otro miedo más que el continuar ansiando la vida, si comprendiera que su inmortalidad está en peligro créeme que correrían a la muerte para salvarse… tengo control de ellas y yo decido cuando siguen y cuando no- Finalizo abriendo sus ojos queriendo rebajar la pequeña victoria del santo.

Algunas de las almas como agiles sombras se introdujeron al cuerpo de Lucifer mientras que otras regresaron por donde vinieron el sonido de la batalla se intensifico, Lucifer solo tenia un objetivo por lo que ni siquiera observo a su alrededor. Su cosmos siniestro lo envolvía de tal manera que daba a entender su gran poder y oscuridad por lo que el ataque realizado por el santo de plata represento un mísero daño, en efecto había quedado paralizado podía sentir que con tan solo forzar alguna de sus extremidades estas ataduras adquirían peso, estas drenaron parte de su energía pero no una parte significativa por lo que no presento daños notorios.

Curioso de probar al santo Lucifer por medio de su cosmos crea una grieta frente de él, tan profunda que su abertura creó un sismo percibido por la mayoría de los presentes pero sin causar daños a terceros, esta grieta principal presenta las mismas características de su anterior ataque, los gritos emergerán cada vez acercándose mas hasta los brazos comienzan a ser visibles, una a una estos demonios posesionados de cuerpos fallecidos recientes como de siglos anteriores regresan al reino de los mortales. Justo debajo de los pies del santo una decena de brazos emergerán, todos dominados por demonios. No paso mucho en que un gran numero logro emerger no solo de la grieta principal sino de otras aberturas alrededor del campo de batalla destinadas únicamente a agredir a un individuo.


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Habilidad: Posesión (1/4)
Invocación con magia negra de espíritus posesivos. Estos colmaran al usuario de grandes cantidades de energía. +2 HP por un periodo de 4 turnos.


HP= 60 – 7 = 53 + 2 = 55

Ataque

Impetum vivi Mortuus ( Nigromancia, 10 puntos)

Spoiler:

- ...Ja...Jaja...JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA!-

Realmente...no entendia nada, aquel suejeto no entendia nada realmente. Que clase de ataque psicologico pensaba que usaba!? Acababa de verme exorcisar una gran cantidad de almas las cuales habia sido liberadas de su poder y todavia tenia el descaro de decirme que no habia logrado nada? No podia parar de reir, realmente no podia. Mi risa lograba tanto estruendo que ni los mismos relampagos al caer y provocar el trueno eran capaces de callarle y podia notar como aquellos que estaban a mi alrededor, tanto santos y espectros paraban sus combates por voltear a verme, mis manos sobre mi estomago mientras mi risa continuaba, sin poder parar, sin perder potencia, simplemente siendo expandida por todo el lugar. Inclusive cuando su ejercito de zombies vino a dañarme, a romper mi piel con sus uñas y a golpearme, no pude realmente parar de reir, a pesar de que me sentia casi sin vida, hasta que finalmente expandi mi cosmos destruyendo esos cuerpos. Aun asi, ensangrentado y sintiendo como una cantidad numerable de liquido vital salia de mi continue riendo.

- Eso es lo mejor que puedes decirme? Mi diosa? Nunca conoci a Athena y de haberle conocido jamas me hubiera importado ni un simple bledo lo que ella pensara, yo no peleo por ella ni por algo tan subjetivo como es el concepto de la "justicia". Eso siempre significa algo distinto para cada persona y francamente estoy seguro que hasta tu mismo crees que esto es justo. Que sucede, tu gran papi sigue sin querer recibirte de regreso y por eso vienes a desquitarte con su creacion? Que se sintio ser expulsado del cielo lucifer para ser enviado directamente a los confines del Infierno? Que sentiste cuando ese perdon que tanto deseaste, esa necesidad de volver a estar en la gloria te fue arrebatada y el sentimiento de arrepentimiento que tenias sobre ti no podia devolverte frente a El? Y sobre todo, que sentiste cuando ese perdon era otorgado a su creacion, a seres "inferiores" como lo somos los humanos, a quienes se nos da la oportunidad de arrepentirnos y asi poder encontrar de nuevo gracia ante sus ojos? Es por eso que todo esto fue planeado? Tu gran envidia hacia los humanos de que a nosotros se nos permite el perdon mas a ti no? No eres mas que un hijo depresivo rebelde que intenta desquitarse con su padre rompiendo su posesion mas valiosa por que crees que asi te dara atencion. Eres patetico. Enteramente patetico. Y estas almas? Que almas crees que usaba antes? Una de las que mejor conversacion me han traido fue la de un asesino de infantes en serie. De las almas que usaste contra mi una gran cantidad me han jurado lealtad. Y la verdad, no importa si termino muriendo aqui, no importa si te apoderas de mi alma y logras ponerme en la peor tortura que tu retorcida mente pueda imaginar. Al final, tendre el resto de la eternidad para reirme de tu patetico existir. Jajajajajaja -

Inmediatamente levante mi dedo, aun riendome para dibujar un circulo, y rapidamente tras esto dibujar un triangulo en su interior, los cuales juntos formaron un sello el cual prontamente se expandio y abrio entre nosotros un portal a otra dimension donde una gran cantidad de almas comenzaron a emerger, llenando el campo de batalla, almas que nunca habian sido sujetadas a Lucifer. Estas pronto comenzanron a rodearme esperando mi señal. Note tambien como a mi alrededor mis palabras parecian inspirar a los demas santos los cuales comenzaban a dar todo de si, y era notable como comenzaban a haber mas muertes en el lado enemigo. Eso era grandioso. Aun si moria, sabia que mis palabras les habian dado fuerza. Pero al menos intentaria debilitar a la cabeza antes de fallecer.

- Mil veces eligiria el alma de estos pecadores sobre la de los dioses de la antiguedad Lucifer. Por que ellos son algo que tu jamas seras, son humanos. Les prefiero mil veces. Creo que es hora de darles la oportunidad de hacerte sentir los horrores que tu los has hecho sufrir por siglos -

Al decir esto di la señal enviando a las almas colectadas a introducirse dentro de Lucifer, haciendole revivir sus muertes, y sus horrores aun despues de morir, las torturas por medio de aquellos demonios, todo de golpe una y otra ves. Apenas podia mantenerme de pie, pero lo hacia sonriente. Debia controlarme o podria terminar muriendo de risa antes de que aquella patetica criatura frente a mi me acabara.

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HP: 27 - 10 = 17

Habilidad utilizada: Impacto Directo

Ataque:

Thanatopsis – (Nigromancia) 7 puntos:

La risa del santo de plata provoco la seriedad en el rostro de Lucifer sonriendo apenas finalizo, todo lo que había efectuado había sido en vano, aquellas almas que creyó exorcizar no podían cambiar su trayectoria, un humano no podía cambiar los designios de un dios de modo que nada que pudiera efectuar uno en beneficio o en desventaja de un alma condenada cambiaria su destino. Aquellos antiguos terrenales habían vivido el libre albedrio, eligieron su camino siendo dotados de la capacidad discernir era por ello que sin importar lo que se hiciera no cambiarían su naturaleza, solo un dios sería capaz de alterar el destino de un alma. Apenas había sonreído pero cuando escucho el discurso lleno de ignorancia por parte del mortal Lucifer no contuvo la risa, no podía encontrar un ser mas ignorante con quien había luchado, jamás en su inmortalidad tales idioteces fueron expuestas por un ser humana.

-Pobre ignorante, ¿la ignorante de tu madre te conto ese cuento? –Finalizo riendo llevando su siniestra a su frente – Que Idiota eres al creerle a alguien que ni siquiera ha contemplado la realidad, simples estupideces ideadas por ignorantes para compensar su carencia de información. ¿De verdad crees que yo quería el perdón de Dios? – Continuo riendo – lo peor de todo, es que crees que ustedes seres humanos tienen el perdón con el arrepentimiento,¿ por que crees que todas estas almas están en mi mundo? ¿Crees que yo las atraje apenas fallecieron y en vida las guie a la perdición? NO IGNORANTE, ellos crearon su propio camino y les fue negada la entrada al cielo por ello cayeron en mi infierno- Descendió su mano hasta que sus dedos tocaron su barbilla. Las palabra del pelirrojo no tenían razón de ser dichas, todo era cuestionable, todo era absurdo hasta su manera de referirse a la deidad, aquel humano ni siquiera poseía conocimientos más que las ignorancias que se le había inculcado típico de una educación mediocre.

-Habla cuanto quieras, un ser tan insípido como tu jamás cambiaria el destino de nadie, ríe y goza lo que tú crees que es… -

Dijo retornando a la seriedad, no valía la pena las palabras de un ignorante, miles de seres humanos han sido condenado por ello, tal cual los falsos profetas que creían algo que en realidad no era, engañando a miles y aquel santo no se alejaba de ellos, un ser minúsculo que creía poseer el control, un ser que sin importar la situación no encontraba otro refugio más que la vanidad propia y la burla. Pese a todas las incoherencias Lucifer retorno a la sonrisa, ¿no era aquello que más le encantaba? La libertad de elección además de la sorpresa que esto ocasiona, muchos que vieran a los santos darían sus vidas en apuesta de que seguían un lema, dictaminado por su líder, un dios que les otorgo las armaduras dándole un sentido a sus vidas, sin embargo quien hiciera la apuesta para aquel sato perdería su alma puesto que parecía no reconocer a nadie como su superior o una inspiración. Lucifer observaba a sus cadáveres reanimados por demonios quienes atacaban sin piedad al hablador, parecía estar más concentrado en sus palabras que motivaban al resto de su bando que en lo que le ocurriría.

Lucifer les miraba de reojo, le importaba poco y nada queel santuario se motivara, los espectros caerían pero volverían a levantarse mientras Lucifer se encuentre en el campo de batalla, si era necesario reanimaría sus cuerpos con demonios del averno. El santo de Triangulo continuaba de pie, sonriente y eso contagiaba a Lucifer quien no podía ofenderse ni siquiera tomar en cuanta las palabras de un mortal. Cerró sus ojos y enterró la espada con su diestra en la tierra, estiro ambos brazos en un gesto de querer recibir el ataque de su rival. Podía escuchar sus voces, sentir su sufrimiento podía ver sus muertes pese a que estas aun no estaban a un metro del Ángel, y asi en esa posición sin efectuar movimiento alguno dejo que aquella almas se introdujeran a su cuerpo, el hedor a sangre, un campo de batalla inundado en numerosos cadáveres, asesinados de manera violenta fueron y esto se dejaba apreciar en los recuerdos, pronto las imagenes de sus muertes llegaron a él, Angelius apenas abrio los ojos, el sonido del metal, los gritos de guerra y miseria se repetian una y otra vez en su mente, santos atravesados por lanzas, desmembrados, atacados por ácido que corroían su piel, tales sensaciones apenas le hicieron temblar, como si fuera una reacción ante el frio, gritos de dolor tras los impactos, el terror de ver sus cuerpos deformados y la vida desvaneciéndose como agua entre los dedos, podia verlo y sentirlo todo... Los labios de Lucifer fueron bañados de un extraño liquido oscuro, no era carmesí como el comun de los humanos, era una especie de sangre extraña sin embargo en el conocimiento pleno y en su propia vanidad como Deidad logro aminorar el daño percibido externamente como también lo ideaba de manera interna. Llevo su siniestra a sus labios palpando aquel liquido que una vez en sus dedos se convirtió en polvo elevándose al cielo. No mostraba dolor ni ira, ni pena , Lucifer no era humano aun si podia poseer características similares, era un ser inmortal, la muerte y el dolor era algo ajeno a su naturaleza y aun presenciandolo y sintiendo en carne viva el dolor no mostró expresión alguna, no sentía necesidad de ello, no temía al dolor ni mucho menos a la muerte.


Ahora era evidente que la sonrisa de muchos se había desvanecido así como su fortaleza al ver que no efectuó siquiera movimiento para defenderse. La hoja de metal incrustada en la tierra comenzara a brillar de color rojo pues debajo de esta el fuego emergerá, Lucifer retoma el control sobre su arma y pronto es dibujado un pentagrama como si el fuego que la formo fuese contenido por la espada, en un parpadeo su figura desapareció junto con sus espada.

Quienes luchaban se apartaron producto del calor dejando un perfecto dibujo de las flamas, ni la lluvia podría apagarla, justo en el centro de la estrella se encuentra el santo, pero el fuego no es dañino, solo genera calor de 40°C aproximadamente.

Spoiler:

Una siniestra melodía como voces de infantes en coro emergerá del fuego como si estos tocaran desde las profundidades y en entre el fuego la fisionomía de Lucifer emerge con las intenciones de arrebatarle el control al santo de triangulo.


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Habilidad: Posesión (2/4)

HP: 55+ 2: 57

HP: 57- 7 : 50




Ataque

Ave Satani (Psíquico, 10 puntos)

Spoiler:

Simplemente sonrei, consegui lo que queria, en especial al ver a tal "emperador", utilizar la palabra Ignorante tantas veces seguidas. Mi ataque habia logrado dañarle pero podia ver como ignoraba el dolor que sentia al igual que las heridas que iban apareciendo en su cuerpo debido a las almas en pena. No era realmente sorpresa, al ser un ser monstruoso como podia serlo Lucifer, realmente no esperaba verlo sucumbir con algo asi, pero sabia que las almas de aquellos muertos sentirian algo de justicia al infligir aquel daño sobre el demonio. Inclusive yo me sentia mucho mejor, y estaba seguro que pronto mi vida daria su ultimo suspiro, probablemente terminada por aquel sujeto. Pero no pensaba caer tan facil, aun podia seguir luchando y daria todo de mi antes de fallecer.

- Exacto, nosotros podemos elegir, y es ese libre albeldrio el cual puede llegar a salvarnos o a condenarnos. Pero entiendo no quieras hablar de eso Lucifer, Angel y Demonio, cuya posicion no es ni siquiera la de un dios como lo fue Hades. Eres la sombra de aquella potencia. pero bueno, veamos que me tienes preparado esta vez -

Al finalizar el daño de mi tecnica pude escuchar un coro gregoriano, sin embargo as voces parecian mas bien las de infantes. Casi como si me respondiese, pude notar como a mi alrededor aparecia un pentagrama, el cual era dibujado con fuego. Me sentia algo extraño, Lucifer decidia combatir almas con almas y sellos con sellos por lo que podia ver. Lucifer. Cuando eleve mi vista note que no podia verle por ningun lugar y de pronto aquellas llamas crecieron grandemente, cual si fuesen grandes paredes que me impedian el ver mas alla de ellas. Segui buscando para ver si lograba sentir la presencia del Demonio cuando de pronto al voltear senti como esta aparecia a mi espalda y forzosamente hacia su camino al interior de mi cuerpo.

De inmediato cai de rodillas sintiendo el gran peso que era para mi el tener tal figura en mi interior. Casi por instinto intente arrancarme el pecho, queriendo sacarlo de mi. Podia sentir como mi cuerpo enfermaba casi al instante, como mi piel se ablancaba y de mi boca podia ver la oscura sangre que era expulsada de mi figura. Era una bruma potente y pesada, y estaba intentando tomar total posecion de mi. Mi rostro mostraba estres al igual que mi respiracion se acelaraba con el ritmo cardiaco de mi cuerpo. No. Asi no podia terminar y no dejaria que asi acabara.

Intente calmarme, no iba dejarle conquistar mi cuerpo de esta manera. Cerre los ojos y me sente en aquella posicion meditatoria. Al instante comece a levitar sobre el suelo, bajo de mi un sello de dorado color comenzo a brillar, expandiendose y apagando las llamas del pentagrama, mientras mi mente separaba aquello que no era de mi de lo que el emperador intentaba poner en mi mente con su presencia. Debia identificarme, quien era, por que estaba alli, y como abria de vivir lo poco que me quedaba. No sucumbiria asi, nunca asi. Alli.

Abri de pronto los ojos, encontrando al emperador de los infiernos en mi interior y elevando mi cosmos le expulse de mi cuerpo, sacandole enteramente de mi interior y lanzandole de nuevo a aquel punto donde se encontraba antes de cegar mi vista con aquellas llamas. Logre levantarme de nuevo habiendo terminado de recibir aquel ataque. Era algo ironico, justo despues de decirle que ser humano era algo que jamas seria, el parasito intentaba entrar dentro de mi. Que cosas.

Escupi sangre, para entonces dar comienzo a mi siguiente ataque. Comence a dibujar alrededor del Diablo con mi dedo indice, trazando en el aire un simple triangulo el cual comenzo a aparecer en frente de mi oponente. Habiendo terminado aquello oprimi en el aire el ultimo punto, aquel lugar detras de Lucifer donde de esta manera logre crear una prision cosmica con la cual encerrarle.

- Pyramida Foteinos -

Dije tras terminar para entonces formar un triangulo con ambas manos, las cuales se mantenian algo alejadas mas formaban el contorno de aquella construccion dimensional.

- Desai -

Dije para comenzar a acercar mis manos, lo cual provocaria que la piramide en si comenzara a encogerse, buscando aplastar a aquel ser que se encontraba en su interior.

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Defensa: Noesis Noeseos

Noesis Noeseos (Anti – Psiquico) 7 puntos:

HP: 17 - 10 = 7 + 7 = 14

Ataque:

Pyramida Foteinos – (Telequinesis) 7 puntos:

Habia logrado ingresar a su cuerpo con facilidad, su oscura silueta literalmente se adentraba en su interior sin dejar huella alguna mas que las alteraciones que el santo presentaba, en el interior de aquel cuerpo mortal Lucifer no tenia necesidad de efectuar algún movimiento físico, su sola presencia podía alterar los funcionamientos del cuerpo, acelerando la respiración y el corazón, podía ver lo que el santo de triangulo incluso más, como si viese su interior como su exterior y fue en ello que se percato de la sangre que este expulsaba, sin rasgo alguno de gozo Lucifer permaneció en seriedad, en su mente un cronometro marcaba los segundos para retirarse. Podia ver al santo de triangulo de modo que reconoció de inmediato la postura, desde ese momento todo indicaba que no llegaría al numero ansiado, el cosmos del santo lo expulso de su cuerpo apagando incluso las llamas que le rodeaban.

La batalla continuaba pese a todo, no podían detenerse si importar lo que ocurriera en el ambiente, de entre los guerreros una sombra oscura emergió levantándose lentamente, su oscuridad se desvaneció en lo que logro distinguirse su blanca piel e intensos ojos rojos, en segundos desde su expulsión el ataque de plata le habia tomado por sorpresa, la oscuridad le envolvió como una sombra, era su propio cosmos y podía sentir como sus miembros se comprimían, como si una energía invisible le cubriese, sin embargo ningún sonido de agonía emergió de sus labios ni expresión de dolor alguna, solo aquella expresión de sorpresa sutilmente dibujada en su rostro.

Su cuerpo habia sido creado por el mismo, pero poseía un “propio” sistema interno de modo que no era inmune, su cosmos podía aminorar los efectos del ataque pero no podían hacerle inmune, su cuerpo era algo abstracto, solo un recipiente para albergar su alma de modo que cuantas fracturas fuesen efectuadas el dolor no era demostrado en su rostro, sus labios se tiñeron de un liquido oscuro pero tras inmerso en la oscuridad nada podía ser percibido. Con sus ojos cerrados Angelius concentro a tal nivel su cosmos de modo que logro desaparecer como una sombra alargada, como una serpiente oscura que avanzaba con tal rapidez, saltando de sombra en sombra hasta perderse en el horizonte. Lucifer se habia marchado.

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Habilidad posesion ( 3/4 )

Hp: 50 +2 : 52
Hp: 52 – 7 : 45